La ansiedad y el miedo


La ansiedad (un sentimiento de preocupación o intranquilidad) y el miedo son sentimientos comunes que algunas veces los pacientes y sus familias tienen cuando se enfrentan al cáncer. Estos sentimientos son respuestas normales al estrés que causa el cáncer. Los sentimientos de miedo o ansiedad pueden deberse a cambios en la capacidad para continuar con las labores cotidianas, pérdida del control sobre los acontecimientos en la vida, cambios en la apariencia personal o imagen corporal, o simplemente por el impacto que causa recibir un diagnóstico de cáncer.

Puede que éstos incluyan la incertidumbre sobre el futuro, al igual que las inquietudes sobre el sufrimiento, el dolor y lo desconocido. Los miedos sobre la pérdida de la independencia, cambios en las relaciones con sus seres queridos, y convertirse en una carga para los demás pudieran abrumar al paciente y complicar la vida de la familia.

Los miembros de la familia pudieran tener estos sentimientos ya que también están inciertos sobre el futuro, o molestos porque su ser querido tiene cáncer. Ellos pudieran sentir culpabilidad y frustración por no poder "hacer lo suficiente". O puede que se sientan abrumados por todo lo que ahora tienen que hacer. Muchos cuidadores de la salud se sienten estresados debido a que enfrentan dificultades para balancear el trabajo, el cuidado de los hijos y cuidarse a sí mismos, junto con otras actividades y más responsabilidades en el hogar. Todo esto encima de la preocupación sobre la atención para la persona con cáncer y su salud.

A veces, una persona con cáncer puede llegar a sentir demasiada ansiedad, temor o depresión y volverse incapaz de lidiar bien con su vida diaria. Si esto sucede, buscar asesoría de un consejero o un terapeuta profesional puede ayudar al paciente y a su familia.

Preste atención a lo siguiente:

  • Manifestación de ansiedad.
  • Dificultad para pensar o resolver problemas.
  • Nerviosismo, agitación, irritabilidad o intranquilidad.
  • Sentirse o lucir tenso.
  • Preocupación sobre la "pérdida de control".
  • Sentirse inquieto sobre algo malo que va a ocurrir.
  • Temblores y agitación.
  • Dolores de cabeza.
  • Arranques de enojo o sentirse malhumorado con otros.
  • Cansancio o fatiga.
  • Trastornos del sueño o dificultades para descansar.

Lo que el paciente puede hacer:

  • Converse sobre los sentimientos y temores que usted o sus familiares puedan tener.
  • Es normal sentir tristeza y frustración.
  • Decida junto a su familia o la persona que le cuida qué cosas pueden hacer para apoyarse mutuamente.
  • No se culpe a sí mismo y a otros al sentir ansiedad y temor. En su lugar, observe sus emociones, inquietudes y creencias sobre lo que ha estado pasando con su vida, y hable acerca de ello.
  • Buscar ayuda a través de la asesoría y grupos de apoyo.
  • Utilice la oración, meditación u otros tipos de apoyo espiritual.
  • Intentar la respiración profunda y los ejercicios de relajación varias veces al día. (Por ejemplo, cierre sus ojos, respire profundamente, concéntrese en cada parte del cuerpo y relájela, empezando por los dedos de los pies y terminando en la cabeza. Al relajarse, imagínese en un lugar agradable, como en alguna playa con brisa o una pradera asoleada).
  • Reduzca su consumo de cafeína, la cual puede empeorar la ansiedad.
  • Considere solicitar referencias a su doctor o enfermera sobre un consejero que le ayude a usted y a su familia.
  • Consulte al médico acerca de la posibilidad de tomar un medicamento contra la ansiedad.

Lo que pueden hacer las personas encargadas del cuidado del paciente:

  • Invite con amabilidad al paciente a hablar sobre sus miedos e inquietudes.
  • No trate de obligar al paciente a hablar, si él o ella no está lista para hacerlo.
  • Escuche detenidamente sin juzgar los sentimientos del paciente o sus propios sentimientos.
  • Decida con el paciente qué cosas puede hacer para que se apoyen mutuamente.
  • Si la ansiedad es intensa, por lo general no es útil tratar de razonar con el paciente. En lugar de esto, hable con el médico sobre los síntomas y problemas que usted nota.
  • Para reducir su propio estrés, trate las sugerencias que se presentan anteriormente, y cualquier otra que le haya funcionado en el pasado.
  • Considere obtener apoyo para usted a través de grupos o asesoramiento individual.

Llame al médico si el paciente:

  • Tiene dificultades para respirar.
  • Está sudando y su corazón late rápida o intensamente.
  • Experimenta mucha intranquilidad.

NOTA: Algunos medicamentos o suplementos pueden causar o empeorar los síntomas de la ansiedad. Si la ansiedad empeora después de comenzar un nuevo medicamento, hable con su médico sobre este asunto.


Fuente: Sociedad Americana Contra el Cáncer

http://www.cancer.org/espanol/cancer/cancerdeseno/guiadetallada/la-atencion-del-paciente-con-cancer-en-el-hogar-una-guia-para-los-pacientes-y-sus-familias-care-at-home-anxiety-and-fear


Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado: 2019-08-02 14:13:44